lunes, 7 de noviembre de 2016

El Héroe de Nacozari

Jesús García era un hombre alto, de un metro ochenta, tenía los ojos claros y el bigote rubio. Emigró junto con sus siete hermanos y su madre a Nacozari, como lo hicieron muchos otros mexicanos, para trabajar en las minas.
Jesús García empezó a laborar en las minas a los diecisiete años; primero fue aguador, conoció a sus compañeros proveyéndoles de sustento. De joven era inteligente y muy sensible lo que hizo que sus puestos laborales fueran cada vez más complejos. A los veinte años ya reconocía la mina y el terreno de Nacozari, y se había convertido en ingeniero maquinista.
Cuentan que en la madrugada del 7 de noviembre de 1907, Jesús estaba cantándole serenata a su prometida, mujer que días después de la tragedia moriría de tristeza. Pero nada de esto sospechaba Jesús cuando Alberto Biel, el conductor oficial del tren en la mina, se declaró enfermo. Así que lo suplió. Fueron eternos los segundos en los que Jesús se dio cuenta de que la pólvora que estaba transportando se había prendido. El tren se había cargado de tal manera que ésta estaba al lado del cuarto de máquinas, lo que significaba que la explosión sería enorme. Jesús decidió que el tren debía permanecer en marcha para alejarse del pueblo de Nacozari, y para lograr ese cometido él tenía que sacrificarse. La onda de expansión sacudió a Nacozari, rompiendo vidrios y cimbrando la tierra. Trece personas murieron en el accidente pero cientos salvaron la vida.
Jesús fue declarado héroe de la Humanidad por la American Cross of Honor de Washington. Desde 1944, por decreto presidencial, el 7 de noviembre es el día oficial del ferrocarrilero. En honor a Jesús se compuso un corrido Maquina 501 y desde entonces Nacozari cambió su nombre a Nacozari de García.
Esta historia, que por momentos adquiere la forma de una leyenda, ha creado un héroe. Hay quienes dicen que Jesús nunca existió y hay quienes afirman que fue amigo del presidente Plutarco Elías Calles. La verdad tiene laberintos y los héroes existen en una realidad paralela que a veces llamamos imaginario colectivo.

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